Roma y su imponente coliseo

El otoño es una época del año ideal para visitar Roma, pues el calor y la humedad propios de los meses de verano han quedado atrás y la luz otoñal devuelve el brillo a los colores ocres de la ciudad, resaltando así los tonos característicos del Trastevere, el barrio más encantador de la Ciudad Eterna.

Roma es uno de los lugares más románticos del mundo; es la ciudad de la «dolce vita”, del arte, la residencia de los césares… Además, no hay que olvidar otro atractivo que la capital comparte con la mayoría de ciudades italianas: su excelente gastronomía.

El Coliseo RomanoEntre los monumentos más visitados destaca el Coliseo, una de las mejores muestras del pasado esplendor del imperio romano. Aunque el Panteón está mejor conservado y la importancia arqueológica del Foro romano sea mucho mayor, ningún monumento romano resulta tan majestuoso como el Coliseo. De hecho, recientemente ha sido elegido como una de las Siete Maravillas del Mundo. Se trata de la mayor estructura de la antigua Roma de las que se conservan en la actualidad. Sin duda, merece la pena visitarlo por dentro e imaginar lo impresionante que debió ser en su época.

Las obras fueron iniciadas por Vespasiano en el año 72 de nuestra era y fue inaugurado por su hijo Tito ocho años después, en un extravagante festejo en el que se llegaron a sacrificar 5.000 animales en un solo día.

El estadio tenía capacidad para 55.000 espectadores, que accedían por distintas puertas, según su estrato social. Aunque el cine nos ha transmitido la idea de que la principal diversión era el martirio de cristianos, lo cierto es que éste se trataba de un hecho raro. Los espectáculos solían consistir en luchas de gladiadores que combatían hasta la muerte entre sí o con animales. Otro espectáculo muy apreciado eran las naumaquias, donde se simulaban batallas navales inundando de agua el estadio en cuestión de minutos gracias a una serie de canales subterráneos ideados al efecto.

El Coliseo es uno de los monumentos más fotografiados de Roma y está repleto de turistas a todas horas. Dado que existen muy cerca otros atractivos, existe una gran variedad de hoteles en Roma cerca del Coliseo. En la zona de Termini, la principal estación de tren de Roma, se encuentra la mayor concentración de hoteles de toda la ciudad. Hay muchos establecimientos de 4 y 5 estrellas y, desde aquí, es fácil llegar a pie a las principales atracciones turísticas.

Los precios de los hoteles varían bastante en función de la categoría, la ubicación y la temporada. En Internet se pueden encontrar ofertas muy atractivas, pero es conveniente tener en cuenta algunos consejos. En temporada baja se pueden encontrar habitaciones dobles en hoteles de lujo a precios más económicos que en hoteles de una y dos estrellas. Así que, a la hora de buscar un alojamiento económico, conviene filtrar por precio y no por categoría. También conviene leer los comentarios de otros clientes, pues en Roma se paga cara la ubicación y la categoría de los hoteles no siempre responde a estándares europeos.